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­MATERIALES Y CUIDADOS

En Ochiere priorizamos materiales que no se oxidan, no manchan la piel y no pierden el color fácilmente, para que puedas utilizar tus piezas sin preocupaciones.
Todas nuestras joyas están elaboradas en acero inoxidable, ofreciendo una calidad superior en comparación con otros materiales utilizados en joyería como el cobre o el latón, que suelen tornarse verdosos con la humedad y teñir la piel.

Trabajamos tres tipos: 304, 316 y 316L.

 

MATERIALES BASE

Acero inoxidable 304:
Es un material resistente, liviano y recomendado para el uso cotidiano. No se oxida con facilidad y mantiene un brillo parejo con el paso del tiempo.
Son una excelente opción para piezas de uso frecuente.

Puede contener pequeñas proporciones de níquel, por lo que no se considera completamente hipoalergénico. Aunque en la mayoría de los casos no genera reacciones, para pieles muy sensibles recomendamos optar por acero 316 o 316L.

 

Acero inoxidable 316:
Es hipoalergénico, ideal para pieles sensibles. Es más resistente a la corrosión que el 304, por lo que soporta mejor el contacto con el agua, la transpiración y el uso continuo. 

 

Acero inoxidable 316L:
La L significa “Low Carbon”. Esta baja cantidad de carbono lo hace aún más estable y duradero que el acero 316.
Por lo tanto, tiene una resistencia superior a la corrosión, lo que permite que las piezas conserven brillo, color y suavidad por más tiempo. 

 

RECUBRIMIENTOS

PVD:
Es la técnica más avanzada para fijar el color dorado. Consiste en depositar una capa de oro mediante vapor, logrando un acabado resistente, uniforme y de alta durabilidad.

 

Chapado en oro:
Se aplica una capa de oro sobre la superficie del metal base mediante un proceso eléctrico. Tiene buena apariencia y brillo, aunque su espesor es menor que el del PVD. Requiere un poco de cuidado para mantenerlo en perfecto estado.

 

Baño en oro tradicional:
Es el método clásico donde el metal se sumerge en una solución con oro. La capa es más delgada y con el tiempo puede desgastarse, especialmente con agua, perfumes o fricción, por lo que requiere de un mayor cuidado para mantenerlo en perfecto estado.
Es un acabado más económico, pero con menor durabilidad.